Me diagnosticaron síndrome de Cushing hace casi 6 años, cuando empecé a perder pelo, tener problemas en la piel, a engordar, orinar muchísimo porque bebía mucha agua, ya que no se me quitaba la sed, dejé de caminar de un día para otro, mi hermana me llevó al doctor y le dijeron que mi hígado estaba muy mal, cada día estaba peor y me dejaron en una clínica, después de unos días y muchos exámenes médicos dijeron que tenía un tumor benigno en la hipófisis que no se puede operar. Mi mami y mi hermana lloraron mucho, ya que les dijeron que yo no las acompañaría por mucho tiempo. Me enseñaron a caminar nuevamente, cada día me dan mi medicina y volví a ser el que manda en casa! 

Te cuento mi historia para que sepas que con amor podemos superar todo! Ahora soy mayor y juego menos, pero cada día sigo dándoles amor a mi hermana y a mi mami